De momento Wall Street está a punto de crear una nueva bolsa para especular con las taquillas de películas de Hollywood y las compañías de seguros destapan champagne por la ley sanitaria que Obama les concedió .
Pero para aclarar veamos un buen ejemplo de lo que es el liberalismo y la mafia financiera con sus diferentes "departamentos" Goldman sacks, Finacial Times , Standard & poors , FMI, The Economist......
y meditemos sobre su codigo de conducta en el caso de Grecia en esta corta e instructiva entrevista- ASI SE DESPLUMA A UN PAIS :
Las capacidades de sanción de las calificadoras son "más grandes que las de Dios", observó el gobernador del Banco Central de Austria, Ewald Nowotny.
Lo que acabamos de escuchar se inscribe en una especulación contra el euro desde la libra y desde el dólar.
Si ganan, desaparece el euro; si pierden, se debatirá una nueva moneda de reserva con mas ahínco. La discusión ya está sobre la mesa.
No hay auge de bolsas sin crecimiento económico. Vale la pena seguir el índice de la bolsa de Shangai para ver si los chinos también son arrastrados por el movimiento global de capitales o si sus controles de capital de corto plazo les llegan a proteger de estos vaivenes.
Por otro lado digamos que lo que sigue a continuacion no esta ocurriendo en España o Mexico .....esta ocurriendo a nivel planetario:
Mientras los diagnósticos procedentes de los organismos internacionales mantienen la tesis del repunte en los países centrales, la realidad cotidiana se muestra esquiva. Los llamados "brotes verdes", eufemismo para identificar la voluntad de los bancos a prestar dinero y de los inversores a tomar riesgos, abriría nuevas expectativas de empleo y consumo. ...bla bla...
Hay que ser diligente y profundizar en la "reforma" del mercado laboral. No hay lugar para sentimentalismos. Si hay que echar a la calle a miles de trabajadores, se hace y punto.
Las nuevas formas de contratación laboral están precedidas por un debilitamiento de los derechos laborales y la reducción de prestaciones sociales. Hoy se busca dar una vuelta de tuerca. Hablamos de abaratar el despido en pro de contratos basura.
Con esta práctica los empresarios verán aumentar poder y riquezas vía exenciones fiscales. El negocio es redondo.
Mucho de lo apuntado es vox populi. Sin embargo, la crisis afecta de manera diferente a los sectores medios, llevándose consigo los sueños e ilusiones de la mayoría de sus miembros.
Así, ven alejarse las expectativas de adquirir una segunda vivienda, ir de vacaciones a lugares exóticos, cambiar de coche cada año o comer en restaurantes de fama.
Han perdido capacidad adquisitiva. Ya no se permiten la licencia de cambiar de celular o de ordenadores cada año. Sus hijos, por primera vez, atisban un horizonte de frustración.
Me refiero a gozar de trabajo estable, tener acceso a vivienda propia o gozar de un sistema de salud pública de amplia cobertura. Sin olvidar el desarrollo de una educación de calidad.
Hoy podemos afirmar, sin temor a equivocarnos, que este camino se viene recorriendo durante las dos últimas décadas del siglo XX. Sus inicios coinciden con la privatización, desregulación y la reforma del Estado. En su encuadre, se abrieron, al capital privado, sectores estratégicos de la economía, entre ellos agua, luz, electricidad, telefonía, transporte aéreo o salud.
Los resultados de tal política han sido mediocres o desastrosos. No hay ninguna estadística rigurosa cuyos datos confirmen una mejor administración en favor de la empresa privada.
Los cortes de luz, falta de agua y mala gestión del trasporte son ejemplos de lo aseverado. Durante décadas las empresas del holding estatal mantuvieron sus altos niveles de eficacia y brindaron un equilibrado servicio público.
No es éste el lugar ni la ocasión para debatir sobre las prácticas corruptas entre funcionarios. Dichas conductas no son, en ningún caso, privativas de los cuerpos civiles dependientes de la administración pública.
La empresa privada no va a la zaga en este rubro. Regalos, lavado de dinero negro, lobbys para conseguir adjudicaciones en contratas y presiones por medios poco ortodoxos, por decir lo menos, configuran un completo pack siempre disponible en manos de empresarios, banqueros y empresas trasnacionales.
Para quienes duden de lo afirmado el ejemplo más reciente proviene del capital financiero. Sus directivos se forraron durante años y cuando les vieron las orejas al lobo salieron pidiendo su salvación a costa de las arcas públicas.
Ahora son los mismos que exigen moderación salarial, flexibilidad laboral y blindan sus contratos con indemnizaciones multimillonarias.
Todo un decálogo ético de buen comportamiento.
Sin embargo, está filtrándose en la conciencia de los trabajadores griegos que esta no es una crisis temporal que pueda ser superada haciendo algunos sacrificios.
Ellos se dan cuenta de que el ataque va dirigido a todos los frentes: empleos, jubilaciones, condiciones laborales, etc. y no parece haber fin a la vista.
En estas condiciones, la única conclusión que pueden sacar es que tienen/tenemos que luchar. En tal situación las ideas del marxismo pueden explicar lo que ha sucedido y quiza ofrecer una salida.
Mientras los gobiernos dan ayuda a ciegas a todos los tiburones.
A las ayudas que recibió la banca se le sumaron las del sector del automóvil y las crecientes inversiones militares de los países que participan en las guerras del amigo americano, mientras que la media y pequeña empresa dejó de recibir los créditos que deben salir más rentables en trapicheos del club de los tiburones.
Una de las consecuencias de la crisis financiera y de su consiguiente efecto económico es el aumento del déficit fiscal, la caída de los ingresos del gobierno y la dificultad de cubrir las deudas.
Hoy destacan en Europa:
Irlanda, ya con plan de ajuste;
Grecia en plena crisis;
Portugal y España en la mira, e
Italia un poco más atrás.
En todos estos meses la situación no ha hecho más que agravarse financiera, económica y políticamente. Este es un asunto clave para la eurozona y los acuerdos monetarios e institucionales que ahí prevalecen.
La puntilla más reciente a la crisis fue puesta por la calificadora de deuda Standard & Poor’s (S&P) que, de un zarpazo, redujo la calidad de la deuda griega tres escalones (hasta una marca BB+) lo que los pone en situación de chatarra y eleva enormemente el costo de refinanciarla.
S&P reprobó la deuda griega y así lo admiten prácticamente sin cuestionamiento los mercados financieros. Pero en realidad ¿quién reprueba? Primero, esa empresa debería explicar qué fue lo que pasó para que de un día a otro redujera su calificación de la deuda griega de modo tan extremo.
Hoy no se puede confiar del todo en el negocio de calificación de la deuda, sobre todo luego del papel lastimoso que tuvieron la misma S&P, Moody’s y Fitch en el desenlace de la crisis del mercado de hipotecas subprima en Estados Unidos desde septiembre de 2007.
Esta es una historia llena de recovecos, entre los que sobresale el problema esencial de que los clientes de las calificadoras son los mismos gobiernos, empresas y bancos que colocan deuda en el mercado.
No hay certeza de si las calificadoras están haciendo su trabajo o, incluso, qué trabajo es el que están haciendo. Pero siguen siendo una piedra angular del sistema de deuda mundial. Calificar deuda es una parte central del negocio del crédito.
Al final no va a quedar nada por robar. Quiza el sistema este dando sus ultimo respiro
--------------------------------------------------------------------
NOTICIA ULTIMA HORA: LE TOCA A ESPAÑA:
Alguien se forró el martes especulando y lanzando bulos
Alguien tiene que acabar en la cárcel y no es difícil saber quién está detrás de los ataques a la deuda española
El pasado lunes, tres de mayo, expliqué en la Ejecutiva de mi partido, que dado que ese día el mercado más especulativo del mundo, Londres, estaba cerrado, sería el martes cuando comenzarían los feroces ataques contra la Deuda Soberana de España. Tengo a bien conocer a media docena de operadores de la city y no dudé en advertir, teniendo tan segura fuente, delante de dos ministras del Reino de España, que al día siguiente algunos iban a aprovecharse y abrir posiciones cortas.
Posición corta
¿Qué es una posición corta? Todos estamos acostumbrados a entender que se puede comprar una cosa por 10, venderla por 14 y por lo tanto ganar 4. Una posición corta o emitir órdenes de venta es al revés : firmar un contrato en el que se vende algo por 10 para luego comprarlo por 6 y por lo tanto ganar 4.
Los especuladores, a la cárcel
En el caso que aquí nos ocupa en relación a lo que sucedió el pasado martes, cuatro de mayo, voy a ser bien clarito:
alguien tiene que acabar en la cárcel y no es nada difícil localizar quien es el ganzúa. Yo ya tengo tres o cuatro nombres en la cabeza y les voy a contar la forma que este humilde economista tiene de localizarlos: hay que poner bajo investigación a todos aquellos que abrieron fuertes posiciones cortas antes de que se disparase un rumor tan falso como absurdo sobre la Deuda soberana de España.
Hechos y rumores malintencionados
Los hechos se produjeron de la siguiente manera.
- Primero, un grupo de inversión abrió numerosas posiciones cortas u órdenes de venta sobre la Deuda Pública española.
- Segundo, ese mismo grupo lanzó el rumor de que España había pedido ayuda para su Deuda Pública, concretamente un rescate, ¡un rescate!, a la Unión Europea y al Fondo Monetario Internacional por valor de 286.000 millones de euros: no cabía mayor y falso disparate ; comenzó a producirse el pánico y por lo tanto a forrarse aquellos que tenían posiciones cortas, es decir, el grupo que anteriormente había emitido tan numerosas órdenes de venta y tan burdo rumor.
- Tercero, apareció el tonto útil, el imbécil de turno, un anormal de serie, ese político alemán que sugirió que la mitad de los países de la zona euro tenían que hacer una declaración ordenada de insolvencia, precipitando aún más las órdenes de venta.
- Cuarto, Moody´s declaró, a su vez, que la crisis no terminaría en Grecia.
- Y quinto, alguien –posiblemente el primero que he citado-, lanzó el segundo rumor de que la agencia de calificación Fitch iba a rebajar la calificación de España.
Todo mentira
Pues bien, ni España necesita rescate, ni Fitch ha rebajado la calificación de nuestra Deuda, sin embargo, por el camino, alguien se ha forrado. Literalmente forrado.
Es menester abrir una investigación en profundidad en el seno de la Unión dado que es bien fácil de reducir la muestra de los sospechosos de engañar al mercado: aquellos que tenían masiva y misteriosamente abiertas tantas posiciones cortas.
Europa no existe
Pero una investigación pública, en este caso policial, no puede exigirse a una clase política europea entretenida en colocar la diana por donde pasa la flecha. Una clase política, encabezada por la miopía de Merkel, que ha permitido que Grecia sucumba, a la espera de que pasen las elecciones alemanas. La conclusión es clara: Europa no existe.
Consecuencias del ataque a España
Un ataque contra la Deuda y los bancos españoles que ha supuesto que el diferencial con el Bono alemán se haya disparado a 113 puntos básicos, que el seguro contra la quiebra (sí, un seguro para asegurar que un Estado puede quebrar, algo tan irrisorio como irreal como reconoce el propio Krugman) se elevó en el caso español 212 puntos básicos, el euro se depreció con contundencia, el precio del cobre alcanzó mínimos de los últimos siete meses y se desplomaron las bolsas europeas:
el Eurostoxx un –3,9%,
el MIB italiano un –4,7%,
el CAC de Paris un –3,6% y
el Ibex español un –5,4%
No se salva nadie
Aquí no se salvó nadie:
el Deutsche Bank –relevante tenedor de Deuda griega-, se desplomó el mismo martes un –9,8%, para que vaya tomando nota la intrépida política amazona financiera Ángela Merkel.
Indicador de confianza del Consumidor
Qué contradicción: mientras los mafiosos de la City nos robaban el Indicador de Confianza del Consumidor español de abril subía con fuerza de 72,7 a 78,2. Algo que viene a confirmar que los rumores desatados eran tan falsos como simulados.
En la city, ahora, todos estos sinvergüenzas se esconden tras los despachos, mientras que esperan que muchos tontos útiles(casi todos los contertulios que cobran religiosamente su sueldo) abran sus bocazas para avalar la inocencia de quien no lo es.
Soy todo oídos para escuchar a los babosos que piensan que este problema parte de los errores de la política económica y no de la comisión de un delito por parte de fulleros que nada tienen que ver con el mercado.
Basado y editado de un comentario de Antonio Miguel Carmona - profesor de Economía y secretario de Economía del PSM-PSOE
http://www.jornada.unam.mx/2010/04/25/index.php?section=opinion&article=026a1mun