Parlamento Europeo: Daniel Cohn-Bendit (subtitulado) sobre Grecia y la economia de falsedades, parasitos e hipocritas:
Julio Anguita en el programa 59 segundos, exponiendo la verdad sobre la crisis de los Bancos:
VETERANO EXPERTO EN BOLSA y MERCADOS FINANCIEROS NOS LO DICE CLARO:
El distinguido profesor emérito de Economía de la Universidad de Ottawa, Michael Chossudovsky, y el investigador independiente Andrew Gavin Marshall acaban de reunir en el volumen titulado The Global Economic Crisis. The Great Depression of the XXI Century (Global Research Publishers, Centre for Research on Globalization, Montreal, 2010)
Son  los trabajos de 16 especialistas que exploran a fondo las causas y consecuencias de un fenómeno que no se debe precisamente a un puñado de banqueros sin escrúpulos, como Barack Obama propone:
Es el capitulo final  de un largo proceso de cambio del modelo económico occidental que se inició en los años ’80. 
La llamada “desregulación” que nació entonces estuvo normada por la implantación progresiva de complejos instrumentos creados por el aparato financiero.
 “La humanidad se encuentra en la encrucijada de la crisis económica y social más grave de la historia moderna”.
Se subraya que no consiste sólo en la burbuja inmobiliaria que estalló hace dos años:
el hundimiento de los mercados financieros en el período 2008/09 fue secuela del fraude institucionalizado y la manipulación financiera.
En obediencia, claro, a la ley del beneficio máximo.
Es notorio que esto ensancha las distancias entre base y cima sociales en materia de distribución del ingreso nacional.
Un estudio que el profesor Emanuel Saez, del Departamento de Economía de la Universidad de Berkeley, llevó a cabo hace dos años revela que en EE.UU. ese distanciamiento “es particularmente brutal a partir de los ’80:
el 10 por ciento más rico (de la población) acaparaba el 35 por ciento del ingreso nacional en 1982, una proporción que alcanza el 50 por ciento 25 años después, reinstalando la situación que precedió al crac de la Bolsa en 1929” (, 15-3-08).
Pese a las declaraciones optimistas de la Casa Blanca, el desempleo en la superpotencia va en aumento.
Otros análisis inquietantes se resumen en el prólogo de The Global Economic Crisis: esta recesión económica no tiene un origen acotado, sino que se inscribe en el desarrollo de una militarización a escala mundial.
“La dirección de la ‘guerra prolongada’ del Pentágono se vincula estrechamente con la reestructuración de la economía global..., la arquitectura financiera global alimenta objetivos estratégicos y de seguridad nacional. A cambio, la agenda militar de EE.UU. y la OTAN sirve de apoyo a una poderosa elite empresarial que socava incesantemente las funciones del gobierno civil.”
El traslado de una ingente masa de capital a las actividades financieras ha “desmaterializado” la producción y provocado un cambio estructural en la economía estadounidense:
crece el número de quiebras de empresas pequeñas y medianas, al mismo tiempo que la economía de guerra, engordada por un presupuesto de defensa de casi un billón de dólares, goza de muy buena salud. La industria de armas de alta tecnología y la contratación de mercenarios para las guerras de Irak y Afganistán conocen, entre otros, un esplendor sin precedentes.
“Basta echar un vistazo a la escalada (bélica) en el Medio Oriente y Asia Central, así como a las amenazas de EE.UU. y de la OTAN dirigidas a China, Irán y Rusia, para percibir hasta qué punto la guerra y la economía están íntimamente vinculadas.”
Las relaciones de la banca con el complejo militar-industrial y los gigantes del petróleo, el papel central que la política monetaria desempeña en la recesión, el peso de la deuda pública y privada, las repercusiones socioeconómicas y políticas que acarrearon las reformas del libre mercado, son aspectos que, entre otros, escrutan analistas destacados como Claudia von Werlhof, Richard C. Cook y Peter Dale Scott.
“Nunca vi algo semejante –señaló Noam Chomsky sobre el estado de ánimo imperante en EE.UU. (www.legrandsoir.).
Escucho la radio para enterarme de lo que dicen los que llaman por teléfono en EEUU:
¿Qué me pasa?, se preguntan. Hice todo lo que me dijeron que hiciera. Soy un buen cristiano. Trabajo duro para mantener a mi familia. Tengo un arma. Creo en los valores de este país y, sin embargo, mi vida se derrumba.”MAS OPINIONES:MÜLLER, MISTER DAX
"La FED debe abolirse, es el mayor pulpo del sistema"Dirk Müller es el corredor de Bolsa más famoso de Fráncfort y quizá de todos los parqués europeos. En una entrevista concedida a Handelsblatt desafía la corrección política y dice lo que todos piensan. Hay que abolir la Fed y la crisis va para largo.
"La primera de todas las fuerzas que dirigen el mundo es la mentira" ------ J.L.Revel . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . "El poder militar o monetario tienen fuerza, pero la fuerza definitiva la tiene la opinion publica, de ahi que haya que manipularla desde que nace"
16 mayo 2010
70 % presupuesto militar EEUU es para ARMAS
complejo militar industrial:ok
Contrariamente a lo que predican analistas y modernos sacerdotes pacifistas del sistema, el ideario de realización de la civilización imperial capitalista no se basa en la búsqueda de la (idílica) "paz social", sino en la búsqueda de la (pragmática) guerra militar como factor primario de dominación y control a escala global. El capitalismo solo hace la "paz" cuando tiene ganada la guerra.
Si EEUU no contara con la  maquinaria nuclear militar del Pentágono, cinco flotas (aviones, barcos y  submarinos) con poder nuclear y  800 bases militares distribuidas por todo el planeta con capacidad de destruir varias veces la tierra, su poderío imperial económico financiero no hubiera podido existir.
El dólar no es la "moneda patrón"  del sistema capitalista por méritos propios, sino porque detrás suyo se  encolumna el poderío nuclear militar de EEUU que oficia de gendarme armado para  el sostén del sistema.
Más de dos tercios de todas las armas  que se vendieron en el mundo en 2008 provenían de compañías  militares americanas.
Incluso Washington fuerza a los países ricos productores de petróleo que dependen de los EE.UU. a convertirse en naciones deudoras debido a interminables adquisiciones de armas ,,,,  
La "paz social" (substancia  matriz del "sistema democrático" de dominio vigente) no surge a priori como un objetivo, sino como un resultante exitoso del control militar sobre  las resistencias sociales que el sistema capitalista establece para mantener  sus estrategias de explotación del hombre por el hombre y de concentración de  riqueza en pocas manos.
"Hacer el amor y no la guerra", es un  mito pacifista que se subvierte dentro de la necesidad histórica del sistema capitalista de lanzar guerras militares permanentes como método de  conquista y apropiación primaria de mercados y de materias primas para el  sostenimiento de su estructura económica productiva imperial.
El sistema capitalista no se alimenta de la paz  sino de la guerra
Es más, los propios procesos  históricos ya incorporaron la "economía de guerra" (emergente de la industria  de la guerra) como un segmento clave de la economía capitalista que en  caso de colapsar arrastraría consigo a todo el sistema a escala global.
La  guerra y el dominio
La historia de la humanidad, es la  historia de la conquista y de la dominación del hombre por el hombre en  distintas etapas y grados de evolución transformacional que transcurren  de  lo simple a lo complejo. 
El control del oponente es la  base del dominio, a nivel del hombre y su entorno primero, y de los sistemas  (políticos, económicos y sociales) que rigen las sociedades, después.
La búsqueda del control y del dominio,  a su vez, definen el carácter imperialista de las distintas civilizaciones (incluida la capitalista)  que fueron marcando la evolución y el  trazado de la historia humana a partir del dominio hegemónico.
Las distintas "civilizaciones"   a lo largo de la historia no fueron producto de la libre creación del espíritu y  de la mente humana, sino un emergente de estrategias y políticas orientadas a  la conquista (militar, económica, política y social) de las clases más  poderosas sobre los estamentos más débiles de la población humana.
La guerra, el uso y el control del  poder militar, la capacidad de destrucción masiva, fue el factor primario  que posibilitó (por medio de la conquista) que grupos reducidos de individuos  (las "clases dominantes") impusieran su voluntad sobre las mayorías y las  condenaran a la servidumbre y el esclavismo.    
Desde la antigüedad, pasando por  Grecia y Roma hasta el "sistema capitalista", las guerras fueron herramientas  estratégicas (claves) para la construcción de los distintos sistemas de dominio  basados en el control masivo de poblaciones para concentrar (por medio de  la explotación del trabajo social) poder y riquezas económicas.
En un escenario siempre mutante y  constante, las guerras (imperiales) evolucionaron de la colonización militar a  la colonización de cerebros, sin perder su objetivo primario de conquistar y  controlar para dominar.

Y contrariamente a lo que predican  los modernos "pacifistas" a ultranza, las guerras no se hacen para matar sino  que se hacen para controlar y dominar.  Las masacres militares no son un  objetivo a priori, sino  un resultante del objetivo a priori de la búsqueda  del control y del dominio militar.
O sea que, en primer lugar, y según lo que surge  como comprobación fáctica y estadística de cualquier estudio estratégico, las  guerras imperiales no se hacen para matar, sino para controlar y dominar.  
En segundo lugar, la destrucción  material y los genocidios humanos que producen las guerras (de conquista  imperial) vienen como consecuencia de la búsqueda de control y dominio sobre  un oponente que resiste, y no al revés.
Por lo tanto, las guerras (de  conquista imperial) no se planifican para matar, sino para apoderarse de  un objetivo estratégico siguiendo la motivación imperialista central de controlar para dominar, y su concepto de aplicación va desde territorios hasta  sociedades y hombres.
Toda acción de dominación del hombre  por el hombre (implícita en la guerra de conquista imperial) se rige por un  axioma estratégico: para dominar, primero hay que controlar por medio de la  guerra. 
El que planea una guerra de conquista  no lo hace para destruir, sino que lo hace con un objetivo estratégico de  controlar y dominar blancos de apoderamiento trazados de antemano, sean  territorios (guerra militar), recursos económicos y mercados (guerra económica),  países y sociedades (guerra social), o mentes (guerra psicológica).
Al contrario de lo que cree la  mayoría, el resultado exitoso de las guerras no se mide por la destrucción  militar, sino por la consecución de los objetivos con el menor costo de  destrucción física o de vidas humanas.
La  guerra por otras vías
Desde la prehistoria hasta la  actualidad, todas las civilizaciones dominantes se valieron de la guerra  imperialista para controlar y dominar: 
A) Territorios (conquista territorial) = Control político
A) Territorios (conquista territorial) = Control político
B) Recursos naturales  (conquista de recursos) = Control económico
C) Sociedades  (conquista  de las sociedades) = Control social
D) Individuos (conquista de  las mentes) = Control ideológico
Los imperios antiguos (Grecia, Roma)  sólo habían llegado a la conquista territorial (guerra militar) y a la  conquista de recursos (guerra económica), y apenas habían tocado el primer  estadio de la guerra social (conquista de la sociedad), imponiendo sus  idiomas o sus creencias religiosas en los territorios conquistados (caso del  latín con Roma, o caso de la religión católica con los imperios de la Edad  Media).
Es decir que  la guerra por el  dominio y control de  las sociedades y de las mentes, sólo se produjo a partir de la  interacción funcional de la tecnología mediática (medios de comunicación) y ahora de la informática (electrónica y computación) orientada a un objetivo de  control y dominio mediante una estrategia comunicacional.
Tres factores (medios de  comunicación, electrónica y computación, y estrategias comunicacionales)  posibilitaron que la guerra por el control y el dominio imperial capitalista  tocara su máximo estadio de desarrollo estratégico: la Guerra de Cuarta  Generación.
 Porqué el capitalismo no puede prescindir de  la guerra militar
 El desarrollo tecnológico e informático, la  globalización del mensaje y las capacidades para influir en la opinión pública  mundial, convirtieron a la Guerra Psicológica mediática en el arma  estratégica dominante de la  4GW (Guerra de  Cuarta Generación), a la  que se agrega una variante "contraterrorista" tras los ataques explosivos  del 11-S en EEUU.
De esta manera, y a partir del 11-S  norteamericano,  la "Guerra Psicológica" (con su variante  la "Guerra  Contraterrorista")  conforma la columna vertebral estratégica de la  Guerra de Cuarta Generación, con los Medios de Comunicación  convertidos en los nuevos ejércitos de conquista. 
La Guerra Psicológica define  el estadio superior de las estrategias de control y dominación ensayadas hasta  ahora por los sistemas imperialistas (dominación del hombre por el hombre) que  se fueron sucediendo hasta llegar al sistema capitalista.
¿Y porqué en este estadio avanzado  del control social sin el uso de las armas el capitalismo no puede prescindir  del uso de la guerra militar?
Por tres razones precisas que la  justifican:
A) Las guerras y los conflictos  militares alimentan a los complejos militares y la industria bélica (con  facturación billonaria) constituida en la pata complementaria de la rentabilidad  capitalista trasnacional.
B) Los conflictos  intercapitalistas por petróleo y recursos estratégicos esenciales para la  supervivencia futura de la potencias sólo se resuelven en última instancia (y a  nivel de desenlace) por la guerra militar.
C) Solamente el aparato y el arsenal   militar nuclear garantizan efectivamente la supervivencia del Estado imperial  y de las potencias centrales, que sin la supremacía del poder militar serían  engullidos  por el resto de los países que integran el sistema a  nivel planetario.
Esta realidad fáctica, entre una  multiplicidad de factores interactivos, explica porqué el capitalismo (hasta su  desaparición) está centralmente determinado por la guerra militar como factor  primario de dominio y de preservación de su sistema económico de explotación del  hombre por el hombre.
En este escenario, marcado por las  leyes y contradicciones de su propia supervivencia, el sistema capitalista está  condenado a vivir en la "guerra permanente",  y, consecuentemente solo hay  "paz" en el microchip instalado en el cerebro de los colonizados mediáticos que  alimentan la rueda del dominio sin el uso de las armas.
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  (*) periodista, investigador, analista de estructuras del poder, especialista en inteligencia y  comunicación estratégica. Es uno de los autores más difundidos y referenciados  en la Web.
Ver sus trabajos en Google y en IAR Noticias
Ver sus trabajos en Google y en IAR Noticias
11 mayo 2010
COLAPSO explicado por SALBUCHI: previsiones
 "O te GLOBALIZAS O te BALCANIZAN"
LA GLOBALIZACION SE HA ACABADO , EL PLAN AHORA ES EL GOBIERNO FASCISTA MUNDIAL:
GRECIA NO TIENE LA CULPA , ES UNA FICHA MAS DEL JUEGO:
Aqui se refiere a la situacion de corrupcion en Argentina:



